Luis Miguel pasó un mal momento tras reencontrarse con Stephanie Salas, su ex pareja sentimental con la que tuvo una serie de desencuentros en el pasado. Todo ello ocurrió en la boda de su primogénita Michelle Salas junto al empresario Daniel Diaz Granados el último fin de semana.
Como se recuerda, la boda se realizó en la exclusiva finca II Borro en la Toscana en Italia en estricto privado. A la boda asistieron amigos cercanos de la pareja y por supuesto la presencia del ¨Sol¨ no iba a pasar desapercida pero nunca pensó que iba a encontrarse frente a frente con la que fue su pareja y en la vida gran dolor de cabeza para su vida pública y sentimental.
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¨Luismi¨ se desentendió de su hija y su ex pareja si no fuera porque Aracely Arámbula, su pareja en ese entonces, la animó a que se haga cargo como padre. Pese a que la sangre no llegó al río entre la familia, los curiosos en la velada dejaron en claro que el intérprete de ¨Será que no me amas¨ y Stephanie no se pasan ni con el saludo pese a que compartieron en la boda la misma mesa.
Cabe señalar que el ¨Sol de México¨ fue a la boda de su hija, acompañada de su novia, la diseñadora española Paloma Cuevas. Incluso el orgulloso padre se animó a dedicarle unas palabras a su engreida en un dia tan especial.
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